para leer y meditar, es cruelmente verdad …
Desde la alegoría de
La rANITA quEMAN...uffff!!! que no sabía que estaba cocinándose…
Imagínate una cacerola llena de agua fría en la cual nada tranquilamente una pequeña rANITA.
Un pequeño fuego se enciende bajo la cacerola, y el agua se calienta muy lentamente.
El agua despacio, despacio se va poniendo tibia, y la rANITA encuentra esto más bien agradable, y continúa nadando.
La temperatura del agua sigue subiendo...
Ahora el agua está caliente, más de lo que la rANITA pueda gozar, se siente un poco cansada, su creatividad decae, su escritura se vuelve una chavacanería, pero no obstante eso no le asusta.
Ahora el agua está verdaderamente caliente y la rANITA comienza a encontrar esto desagradable, pero esta muy debilitada, entonces soporta y no hace nada.
La temperatura continúa subiendo, hasta cuando la ranita termina simplemente...cocinándose y muriendo.
Esto demuestra que, cuando un cambio viene de un modo suficientemente lento escapa a la conciencia, y no provoca en la mayor parte de los casos ninguna reacción, ninguna oposición, ninguna revuelta…
Si miramos lo que sucede en nuestra sociedad, en nuestro lugar que todos ayudamos a pintar nuestra aldea...... periodismo ciudadano, desde algunos años ya, podremos observar que están sufriendo una lenta deriva a la cual nos estábamos habituando.
Una cantidad de cosas fueron poco a poco banalizadas, y hoy disturban apenas o dejan directa y completamente indiferente a la mayor parte de las personas.
En nombre del progreso, de la ciencia, de la tecnología y del aprovechamiento se efectúan continuos ataques a las libertades individuales, a la dignidad, a la integridad de la naturaleza humana, a la belleza y a la felicidad de vivir, lentamente pero inexorablemente, con la constante complicidad del víctimario, consciente .... incapaz de defenderse.
Las negras previsiones para ese futuro en vez de suscitar reacciones y medidas preventivas, no hacen más que preparar psicológicamente a la gente para aceptar las condiciones de vida decadentes, y también dramáticas.
Cuando hablé de esto por primera vez, era para un mañana...
Ahora es tarde
Conciencia o cocción, debemos elegir!
Entonces, si no eres como la rANITA quEMAN……uffff!!!!
Ya medio cocinada, den un saludable golpe con sus patas antes que sea demasiado tarde!.
No entiendo ,Alva ,¿ querés que nos rajemos definitivamente ? no pienso darles ese gusto , y dejarles la casa limpia .
ResponderEliminarkuma
Me encantaron las ranitas...!! jaja
ResponderEliminarpara mi... es una sátira en cuentito de cosas que fuimos pasando...
no analice tanto la cosa.... solo me entretuve... cri cri cri.... jaja.
Sdos.
Dani.
pd. creo que el cri. es del un grillito.. je.
Vos Renne anda con piggy al chiquero YA!!!
ResponderEliminarY vos Kuma limpia la casa, agarra la escoba y sacame toda las chirusas de alla
Besos
Alvaro
Hola Alvaro, no te falta la razón, es verdad que poco a poco nos cambian y desarman nuestra capacidad de reacción, tu cuento de la ranita es muy ilustrativo, esas mismas situaciones las he observado a lo largo de algunos años aquí en España.
ResponderEliminarPor eso me ha gustado mucho el planteamiento: conciencia o cocción, creo que debemos elegir lo primero y para eso, para elevar las conciencias sirven artículos como estos.
Muy interesantes las entradas Me gusta sobre todo el uso del lenguaje y sus giros (que muchas veces desconozco, pero que comprendo en su contesto).
Saludos. Juan Francisco.