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miércoles, 23 de marzo de 2011

-Aprendizajes-


"Un día dando un paseo por el monte, un joven vió sorprendido, que una pequeña liebre le llevaba comida a un enorme tigre malherido, el cual no podía valerse por sí mismo. Le impresionó tanto al ver el hecho, que regresó al siguiente día para ver si el comportamiento de la liebre era casual o habitual. Con enorme sorpresa pudo comprobar que la escena se repetía: le liebre dejaba un buen trozo de carne cerca del tigre. Pasaron los días y la escena se repetía de un modo idéntico, hasta que el tigre recuperó las fuerzas y pudo buscar la comida por su propia cuenta. Admirado por la solidaridad y cooperación entre los animales, se dijo: -"¡No todo está perdido!" .Si los animales, que son inferiores a nosotros, son capaces de ayudarse de este modo, mucho más lo haremos las personas". Y decidió hacer la experiencia: Se tiró al suelo simulando que estaba herido y se puso a esperar que pasara alguien y le ayudara. Pasaron las horas, llegó la noche y nadie se acercó en su ayuda. Estuvo así durante todo el otro día. Ya estaba a punto de levantarse, mucho más decepcionado que cuando comenzamos a leer la historia, con la convicción de que la humanidad no tenía el menor remedio. Sintió dentro de sí la desesperación del hambriento, la soledad del enfermo y la tristeza del abandono. Su corazón estaba desvastado. Casi no sentía deseos de levantarse. Entonces allí, en ese instante, escuchó con toda claridad una melodiosa voz, muy dentro de él, que le dijo:

-"Si quieres encontrar a tus semejantes, si quieres sentir que todo ha valido la pena, si quieres seguir creyendo en la humanidad, para encontrar a tus semejantes como hermanos...

¡Deja de hacer el papel del tigre... y simpelmente, sé la liebre!".

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11 comentarios:

  1. Ambar, estraordinario mensaje, creo que todos debieramos ser liebres, es bueno recordarlo. Un fuerte abrazo mi amiga

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  2. Qué texto tan hermoso. Sin duda hay que ser la liebre y yo tengo que dejar de hacer el papel del tigre. Gracias por esta historia.

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  3. Hola Regina querida,creo que todos deberíamos ser"libres y liebres".
    Un abrazo bien apretadito!!!!,que tengas el mejor día!!!!!!!!
    Ambar...

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  4. Hola Nicole Sagan,es muy importante"darse cuenta",me alegra mucho que capitalices esta historia,porque la misma es para todos los ámbitos de nuestra la vida.....
    Saludos.
    Ambar...

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  5. Hola DDmx,gracias por tu comentario,siempre es más sencillo y llevadero "hacer"que"esperar",por lo general el hacer nos va llevando por el camino del recibir,y desde ahí siempre podemos valorar lo que damos sin tener que esperar nada a cambio.
    Saludos.
    Ambar...

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  6. El reflejo en aquella liebre, no sólo permite ver su tamaño sino que es tan necesario en esta selva Babilonia como el mismísimo Rey León.
    Una inspiración sacada de un tirón, amiga.

    Abrazos.

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  7. Maravillosa tu reflexión Adrián!!!!!!!clap....clap.....clap.......clap.....clap....clap....
    Abrazos maternales.
    Ambar...

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  8. Estupendo cuento con una moraleja eficaz.

    Uno se pregunta porque le cuesta tanto a la gente dar???

    Cariños

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  9. Hola Abuela!!!!!!bienvenida.
    Es muy coherente lo que comentás,a mí me parece que es porque no sabemos recibir....uno no puede dar lo que no puede ni sabe recibir.
    Gracias por comentar.
    Saludos.
    Ambar...

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  10. Hola amiga Ambar.Tomaré nota.
    Un abrazo.

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"Solo tengo dos certezas: la de la ansiedad de lo absoluto que hay en mi y la imposibilidad de volver el caos del mundo a un orden racional" Albert Camus

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