en el norte colorado,
los poetas lo han llamado
a este color bermejo.
Sin embargo por mis venas
corre sangre arrabalera,
fluye tinta verdadera
de asfalto, nostalgia y penas.
Tinta que mancha
con letras, la palidez
de las hojas, y la vejez
que penetra con revancha
entre mis huesos calados.
Alguien ocupa el espejo
y se adueña del reflejo
de este rostro avejentado,
y de experiencia surcado.
Suaves arrugas sembradas
de esfuerzo y agachadas,
busto de un hombre cansado
de vivir a los saltos.
Acobardado de escuchar
al sur siempre protestar,
al norte carente de asfalto,
a los poetas describiendo
nuevamente, un simple amanecer.
Si la gente se acuesta sin comer
y se levanta al alba, para que andar repitiendo.
La sangre perezosa fluyó,
los bandos adelantaron los peones,
la partida ha comenzado. Moretones
me han quedado de sangre color punzo.
EXCELENTE . UN POEMA CON EXPRESION .TIENE DOBLE VALOR
ResponderEliminarVamos Kanta...!... que bien escribis... que bien...
ResponderEliminarBeso a vos y a tu pluma... Fiel compañera.
Dani.